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Luna de miel

Luna de miel en Cartagena: una guía para enamorados

14-07-2017, 12:18:19 PM Por:
nupcias.mx

Esta ciudad en Colombia representa una maravillosa, romántica y accesible opción para dos viajeros recién casados.

Es verdad que una luna de miel en Cartagena a veces está repleta de las referencias turísticas más obvias, pero también esconde verdaderas joyas tras sus coloridas fachadas.

Y es que un viaje a esta ciudad en el caribe colombiano vale solo por caminar de la mano con el amor de tu vida entre sus calles coloniales, visitar sus casonas y recorrer la muralla declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

No obstante, también pueden enamorarse aún más entre las nuevas propuestas de esta ciudad cosmopolita. Y claro, comer delicioso, consentirse en un spa de altos vuelos y disfrutar de la mejor vida nocturna del sur de América.

1. Escenario de novela.

Lo más importante en una luna de miel es la elección del hospedaje. Eviten escatimar en este tema y elijan el hotel Santa Clara, frente a las murallas y con vista al mar, un ícono de Cartagena. Sus paredes, que datan de 1621, evocan el escenario de la famosa novela Del amor y otros demonios, firmada por Gabriel García Márquez, cuya trama sucede en el siglo XVIII, cuando este recinto todavía era un convento femenino.

Hoy es uno de los hoteles más emblemáticos de toda Sudamérica, preferido por artistas, escritores, políticos, magnates financieros y el jet set internacional. Preciosos jardines, alberca y habitaciones de ensueño recuerdan que la mejor combinación se esconde entre paredes del pasado y toda la prosperidad del presente.

2. Conquisten su estómago.

Aunque Cartagena de Indias sea la capital de la modernidad en Colombia, los pasos del viajero están imbuidos de leyendas centenarias; para palpar todo el esplendor histórico y marino, es obligatorio comer en el restaurante Club de Pesca. La recomendación es sentarse en una de las mesas para dos que dan a la marina y esperar el atardecer con una botella de champán.

El establecimiento está enmarcado por una de las fortalezas militares coloniales de la bahía: el fuerte de San Sebastián del Pastelillo, construido en 1743 por órdenes del virrey Sebastián de Eslava. Sin embargo, la postal se completa con la vista hacia los modernos rascacielos de la ciudad. La especialidad son las muelas de cangrejo, un agasajo que no se deben perder.

En toda luna de miel debe haber una cena de ensueño, con un buen vino, comida exquisita, servicio inmejorable y un ambiente espectacular. Hace cuatro años, los hermanos Jorge y Mark Rausch inauguraron el restaurante Marea dentro del Centro de Convenciones.

Se trata de un lugar con decoración delicada en colores menta y marfil, ubicado frente a la Torre del Reloj –emblema de la ciudad– y con vista hacia la Bahía de las Ánimas. Como era de esperarse, los reyes del festín son los pescados y mariscos, los mejores afrodisiacos. Recomendamos el coctel de langosta y la mojarra frita cartagenera.

Dato para los sibaritas: si queda alguna duda sobre si acudir o no a este sitio, basta recordar que los hermanos Rausch son el referente culinario de Colombia, propietarios de todo un emporio gastronómico. Entre sus restaurantes destaca Criterion, en Bogotá, que ha figurado por varios años consecutivos en la lista de Latin American 50 Best Restaurants de St. Pellegrino y es considerado por muchos el mejor del país.

3. Paseo romántico.

No existe viajero que no esté ansioso por ponerse un sombrero, pues el sol en Cartagena es implacable, y caminar dentro de la ciudad amurallada. Aunque ojo, fuera de las paredes de piedra se esconde Getsemaní, un barrio colorido que se ha convertido en todo un festival de cafés, bares, restaurantes y muchos hipsters mochileros merodeando el panorama.

Como sucede en otras localidades del sur del continente, estamos ante un barrio antiguo, olvidado por la mano de Dios durante décadas y que, en tiempos recientes, ha sido elegido por artistas bohemios y trotamundos que desean conocer una oferta cultural menos institucional.

El punto de reunión es la Plazuela de la Trinidad, justo frente a la parroquia del mismo nombre construida en 1539. Aquí, restaurantes de moda como la Champagnería del Mediterráneo habitan armoniosamente entre grafitis y puestos callejeros, turistas en bicicleta y lugareños platicando afuera de sus casas, ya entrada la tarde, claro… cuando el calor ha dado un poco de tregua. Lleven la cámara en mano, se querrán tomar fotos en cada rincón.

Foto: Deposit Photos

4. A bailar se ha dicho.

Los colombianos saben cómo mover las caderas y hay que hacerles competencia. Pero no se preocupen, porque su amor se notará a kilómetros de distancia y serán los reyes de la noche. El mejor lugar para danzar es Café Havana, con buenos cocteles y música en vivo para disfrutar una velada que les será imposible borrar de su memoria. Es cierto, hay muchos turistas, como en toda Cartagena, pero no faltan los nacionales dispuestos a pasar el mejor rato. Este club nocturno también es famoso porque Hillary Clinton lo visitó durante la Cumbre de las Américas, celebrada en Cartagena en 2012, y le encantó.

5. Para relajarse

La reconocida diseñadora de modas Silvia Tcherassi puede presumir de tener el mejor spa de la ciudad. Con siete exclusivas habitaciones, el Tcherassi Hotel + Spa refleja el brío y la exuberancia cartaginesa. También puede ser una buena opción para hospedarse.

El lugar bien vale una visita, hagan una cita antes de regresar a la vida cotidiana, para que lleguen a su nuevo hogar transformados por dentro y por fuera. Algunos tratamientos utilizan prácticas e ingredientes indígenas de Colombia y Sudamérica, imposibles de encontrar en otro lugar del mundo.

6. Shopping time.

Si bien los aparadores de la ciudad amurallada nos llevan a cometer más de un pecado para la cartera, les recomendamos ir a la concept store St. Dom, una boutique de 700 metros cuadrados cuya premisa es lujo, arte y diseño. Zapatos, joyas, accesorios, artesanías y hasta libros son algunas de las tentaciones que alberga este establecimiento, cuya sede es una casa de estilo colonial con 300 años de historia. Perfecta para comprar regalos y una que otra sorpresa

Tips:

Participamos como único medio mexicano en Love Colombia, un encuentro al cual asistieron agentes de viajes y expertos
de bodas de varias partes del mundo. De esa experiencia, aquí nuestros infaltables:

  • Fiesta en el Baluarte San Francisco Javier.
  • Hospedarse en el Punta Faro Hotel (playa) y en el Hilton (ciudad).
  • Ir de shopping a la boutique de Juliana Sierra.
  • Ver la puesta de sol con Sunset Sailing.
  • Probar las delicias del Bastión.
  • Visitar la capilla del Charleston Santa Teresa.
  • Tomar fotos en los jardines del Pestagua.
  • Bailar champeta y cumbia hasta que duelan los pies.

[ Artículo de publicado en la edición 121 de Nupcias, correspondiente a los meses de octubre-noviembre. Puede tener algunas modificaciones con respecto a la versión impresa. ]

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autor Aunque estudié Filosofía, ahora me dedico a viajar, comer, ir al teatro, leer y escribir todo lo que puedo. Este año, emprendí el viaje más maravilloso y retador al que me he visto expuesta: terminar mi primera novela. También escribo sobre literatura, bodas, viajes, gastronomía, arte y teatro para varias revistas mexicanas.